Su mejor año en la última década tendrá el costo marginal de la energía en el Sistema Interconectado Central (SIC), ubicándose en su nivel más bajo desde 2006, cuando comenzó la crisis energética provocada por los recortes de gas natural desde Argentina
Según datos del CDEC-SIC, organismo que coordina la operación de las eléctricas, el costo marginal finalizaría el año en torno a los US$ 89 por MW, una baja de 31% respecto de 2014, cuando se ubicó en US$ 130 por MWh. Esta será la primera vez que este costo -que determina el precio al que las generadoras intercambian energía en el sistema- cae de los US$ 100 desde 2010.
Las razones son varias, pero según la consultora y experta María Isabel González, hay dos factores principales: el incremento de las lluvias, tras cinco años de sequía que redujeron por debajo del 30% el aporte de la hidroelectricidad a la generación eléctrica, y la baja en los combustibles fósiles, que ha permitido que las centrales a carbón o gas natural desplacen de la “punta” a las unidades diesel, que son las más caras del sistema.
“Las lluvias, sobre todo de la última parte del invierno y algunos meses de la primavera, han incidido en que tengamos más disponibilidad de agua para generación eléctrica. Los combustibles fósiles, como el carbón y el gas natural, también han caído, lo que en algunos casos se ha traducido que en ciertas horas de la noche, el costo de generación sea cero, por ejemplo”, dice González.
A partir de septiembre, el aporte de la generación hidroeléctrica ha sido creciente y hoy representa el 60%, aunque en noviembre llegó a un peak de 70%, y algunas unidades del sistema entraron en situación de vertimiento de energía.
Con el cambio en la indexación de los contratos y las licitaciones de suministro llevadas adelante por el gobierno, el costo marginal de la energía no influye mayormente en los precios que pagan los clientes regulados del sistema -hogares, comercio y pequeñas y medianas empresas- y afecta principalmente a aquellos grandes consumidores que tienen contratos indexados a este indicador.
Asimismo, las restricciones de transmisión -que se solucionarían a partir de 2017- también permitirían tener mayor estabilidad en los costos.
Combustibles a la baja
En un artículo del blog especializado “Breves de Energía” -uno de cuyos editores es el economista Alexander Galetovic- publicado a mediados de diciembre, el académico de la Universidad de los Andes Ignacio Núñez sostiene que el costo variable de las principales unidades térmicas a gas y carbón del sistema ha caído entre 49% y 11% en los últimos doce meses, mostrando las bajas más relevantes, centrales como los complejos Tal Tal y Bocamina de Endesa, Nueva Renca y Campiche de AES Gener y las unidades diesel de Nehuenco, propiedad de Colbún.
“El costo marginal ha caído en el SIC porque aumentó la disponibilidad de generación térmica a carbón y porque cayó el precio internacional de los combustibles fósiles”, sostiene el académico.
La situación se mantendría por los próximos meses, señala González, principalmente porque los deshielos han mejorado.
Según el último reporte del CDEC-SIC -de noviembre pasado-, el nivel de excedencia -esto es, los años estadísticos más secos que el actual- se encuentra en 67%, frente al 90% registrado en 2012 y el 86% de 2013, cuando la sequía recrudeció en la zona centro sur del país.
El incremento de la demanda también ha tenido un efecto positivo. Este año el crecimiento terminará en torno al 3%, un alza moderada del consumo eléctrico, principalmente por la ralentización de la economía.
“Mientras el cobre siga bajo, la demanda por energía crecerá a tasas moderadas, ya que nuestra economía, a diferencia de los países más desarrollados, aún no logra despegar ambas curvas”, dice González.
Según datos del Consejo Minero, la minería representa el 33% del consumo eléctrico del país y un 10% del costo de producción de la industria.
Proyecciones 2016
Los expertos coinciden en que la situación de costos se mantendría estable al menos por el próximo año, pero los precios se elevarán paulatinamente hasta que comience el “año hidrológico”, en abril de 2016.
“Entre enero y marzo, los precios tenderán a subir como lo hacen de forma cíclica, pero creo que no llegarán a los niveles registrados en otros años”, dice González.
Según proyecciones de la Comisión Nacional de Energía (CNE), el costo marginal en 2016 anotará una nueva baja, esta vez en torno al 25%, para ubicarse en US$ 67,4 por MWh, mientras que hacia 2017 mostraría un leve incremento.
“Mientras se mantengan los precios bajos y el consumo de energía continúe creciendo a tasas modestas, estas condiciones seguramente se mantendrán y los costos marginales continuarán bajos”, sostuvo Núñez.
Energía solar lidera crecimiento
El auge de las Energías Renovables No Convencionales (ERNC) ha permitido su rápida incorporación a la matriz del SIC, siendo la tecnología que muestra mayor crecimiento. Según datos del CDEC-SIC, las centrales solares aportaron el 1,8% de la energía total producida este año, frente al 0,71% de 2014, mientras que las unidades eólicas representaron el 3,43%, frente al 2,31% del año pasado. En el caso del principal sistema eléctrico, más del 70% de los proyectos en construcción son en base a ERNC. Según señalan fuentes del sector, el crecimiento mostrado por esta tecnologías va de la mano con los cambios introducidos a las licitaciones de suministro, que han permitido que a través de contratos de largo plazo, los desarrolladores logren el financiamiento bancario para la construcción y puesta en marcha de las centrales.
Diario Financiero
Hacer Comentario